viernes, 17 de agosto de 2012

IF...


        El filme, como primer impacto, es precisamente eso: un impacto. En lo personal, a mí me gustó bastante, la colocaría entre mi compendio de favoritas. Comentaba a los visitantes de mi perspectiva sobre el filme, he aquí la repetición: Un gran talento habita en Malcolm McDowell, esa personalidad extrovertida que sólo él interpreta. El cineasta nos muestra una manera sutil de como se desquician las mentes por manifestarse ante una represión. La personalidad de los bravucones, me pareció un tratamiento genial, no contiene esa típica modalidad desesperada por mostrar una rebeldía; no, esos son lentos, elegantes, sumisos para después estallar.





        El filme tiene secuencias estéticas de gran valor -me atrevo a decir: artísticos- presentados sin ninguna prisa. La historia es con la calma, en el momento del desborde, todo me parece creíble.

        Al principio me disculpé, pues no teníamos la película en idioma original y con subtítulos al español, la gente que la miró hasta el final, pudo darse cuenta que ello no desacreditaba la genialidad del filme.

        Los visitantes perspectivaron acerca del tratamiento de jóvenes que crecen dentro de un internado. Decía uno de los visitantes de abstenernos a hablar de ello, pues, nunca hemos vivido dicha crueldad como para opinar, pues hemos de especular, entonces.


        Otro de los visitantes habló de los cineastas pertenecientes al "free cinema", al cual pertenece Lyndsay Anderson. Hablamos de la misma corriente denominada con otros términos y de su propia adaptación con la idiosincrasia de cada país.


        Sigo invitando a las personas que atienden la sesión de comentarios, participen, y a los que no, pues atiendan a la sesión.



No hay comentarios:

Publicar un comentario